domingo, 24 de febrero de 2013

Mi gran amor

Sin él, mi vida sería diferente.
Desde que nací él fue mi amor, mi todo.
Me enseñó a comprender el mundo, a investigar más allá de lo establecido, a amar aceptando todos los defectos y virtudes. Me educó en la mayoría de todo lo que hoy sé.
Me creó dudas y certezas, me demostró que no es necesario permanecer presente para amar a alguien y que a pesar de todos los errores cometidos siempre podría tener su alma a mi disposición. Sería capaz de entregar hasta la última gota de su sangre por mi honor y mi vida y, aunque no siempre se lo muestre, realmente sería capaz de hacer lo mismo por él.
Es la persona que ha marcado mi vida. Es y ha sido mi primer amor, mi gran amor. Un amor que jamás me ha fallado. Un amor real, verdadero e inconmensurable.
Este amor es mi padre, la razón de mi existencia.

miércoles, 20 de febrero de 2013

Ni un recuerdo más.

Es un fuerte ardor en el pecho,
un vacío en todo el cuerpo,
una debilidad que me inspira.

Es sentir que no sientes,
que amas sin amar,
que quieres sin querer.

Debilidad de corazón,
espíritu de mente,
olvido de razón.

Nada más si vive.
Cuando el corazón llora,
el alma escribe.

Nada más si olvida.
Mientras tú le añoras,
nadie mira.

Tal vez tuvieron razón,
tal vez sí fui yo,
pero, tal vez no.

¿Remordimientos del pasado?
Pura estupidez.
Sin embargo a tú lado...

Borremos los recuerdos,
olvidemos viejos tiempos,
no habrá más.

Quizás desee añorar,
mas no lo haré
aunque me deba torturar.

Sentiremos desangrarnos,
caer a tierra y agonizar,
mas ni un recuerdo más.

Quizás deseemos rendirnos,
volver al pasado,
mas ni un recuerdo más.

Sigamos el sendero,
a pesar de cojear,
a pesar de sollozar.

Sigamos el camino,
pero siempre de pie,
sin arrastrarnos por él.

Todo irá bien,
o todo irá mal.
Mas ni un recuerdo más.

lunes, 4 de febrero de 2013

Apariencia.



Todo va bien.
Parece perfecto,
una vida de ensueño,
deseada por cualquiera.
Pero, detrás de cada sonrisa,
hay una lágrima escondida,
un sentimiento negro,
un frío recuerdo.
No son sólo lágrimas de tristeza,
son gotas de rabia,
lluvia de dolor,
rocío de impotencia.
¿Qué hacer cuando la solución es someterse a la dura esclavitud o tomar medidas extremas? Dependiendo del contexto la solución puede ser una u otra, pero en este caso es un interrogante.
Un interrogante indescifrable,
un sentimiento indescriptible,
un dolor invisible,
una duda eterna.
¡Tened piedad y olvidadme! ¡No necesito saber nada más!
Todo es negativo, lo sé; 
el mundo se hunde sin parar,
y vosotros en lugar de mirar lo bueno 
no dejáis de criticar.