viernes, 20 de diciembre de 2013
El fin de los románticos.
¿Qué fue de las cenas románticas?
¿Qué fue de los trajes?
¿Qué fue de la rosas?
¿Qué fue de los caballeros?
¿Y qué fue del significado de "te amo"?
Todo se perdió y ahora vivimos en un nuevo mundo.
Se acabaron las cenas a la luz de la luna,
las manos cogidas sobre la mesa,
el pianista tocando una canción delicada,
las miradas de deseo, de amor, de ternura...
Se olvidaron las rosas rojas en las floristerías,
las cajas llenas de bombones,
las palabras suaves y delicadas,
los poemas entre enamorados,
los cumplidos, los modales, los detalles...
Desapareció el mundo romántico y surgió la rebeldía.
Los "te amo" que eran para toda la vida
se cambiaron por "te quiero" sólo por esta noche.
Las veladas románticas entre enamorados
por las grandes fiestas con alcohol, drogas y ambulancias.
El amor verdadero se esfumó en una lágrima.
Es realmente complicado encontrar un amor así,
la sociedad prefiere tener mil opciones a una sola prioridad.
No creen en el amor, en los modales y las rosas,
sólo viven en rebeldía y relacionan amor con sexo.
Es deprimente vivir en una sociedad así,
donde encontrar un amor eterno sea casi imposible,
donde las promesas no se cumplan,
donde los amores vengan y se vayan,
donde los "te amo" sean "por ahora"...
¡Amar sin amar es una locura!
Pocas parejas se amaran de verdad,
pocas cumplirán sus promesas,
pocas llegarán juntas hasta el fin de sus días...
Casi nadie quiere comprometerse en este mundo de locos.
El amor ya no es amor, la vida ya no es vida y la muerte seguirá siendo la misma.
sábado, 2 de noviembre de 2013
Ilusión al azar.
El amor no existe,
es tan sólo una ilusión.
Una ilusión que puede durar un instante, o toda una vida.
Una ilusión que puede llevarte a la desgracia,
o a una tierna compañía.
Una ilusión que nace y muere,
en la vida o con la muerte.
Una ilusión que llena en un instante
y que vacía cuando parte.
Triste y melancólica,
o agradable y seductora.
Así es, un juego de azar.
O se queda o se va.
jueves, 3 de octubre de 2013
De la mañana a la noche.
De la mañana a la noche,
entre caricias y roces.
Eras mi dueño,
mi alma,
mi calma.
Mío eras y tuya fui.
Mi amor,
mi vida,
mi luz.
Pero dejaste de ser mío.
De la mañana a la noche,
sin caricias ni roces.
Te perdiste.
Te perdí.
Nos perdimos.
Mas te busqué.
De la mañana a la noche,
pidiendo caricias y roces.
Mas me atacaste con dureza.
Me apuñalaste,
del mismo modo que me amaste.
Con dureza,
orgullo varonil
y grandeza.
Inconsciente te llamé.
Agonizaba con tu nombre
desgarrando mi garganta.
Te amé hasta la última gota,
hasta quedarme seca.
Sin mi amada respuesta.
Y sufrí.
Durante meses,
durante siglos.
No morí,
sólo quedé maltrecha.
Sangrando toda la vida.
Y cuando mi mente no podía saber,
cuando no podía amarte,
cuando no tenía fuerzas...
Volviste a mí.
Sin memoria,
sin historia.
Dejé todo.
Volví sin motivo
a mi tiempo perdido.
Y sin tiempo te tengo.
No estás a mi lado,
no siento tus brazos.
Pero vuelves a ser mío,
de la mañana a la noche.
Mas sin tiempo y sin voces.
martes, 24 de septiembre de 2013
La tormenta.
Tranquilas olas.
El silencio ahoga.
Comienza la tormenta.
Los pájaros pían,
el mar se enfurece.
Una ola lo cubre todo.
El barco se inunda.
Los pájaros pían.
Llegan restos a la orilla.
El mar sigue bravo.
Los pájaros pían.
Llega una gran ola,
arrasa con todo.
Los pájaros gritan.
Y cesa.
Todo vuelve a la calma.
Los pájaros callan.
Todo se recompone.
Invade el silencio,
y los pájaros marchan.
viernes, 13 de septiembre de 2013
Cinco sentidos.
tímpanos perforados,
cuerdas vocales rotas.
No hay tacto.
No hay olfato.
Nadie lo percibe.
Tu cuerpo grita,
desgarra su voz.
Se desmaya.
Nadie lo percibe.
Son sentidos que no sienten.
Es inútil.
Brazo sobre brazo.
En tu soledad
te acurrucas.
Te acaricias,
te peinas,
te consuelas.
Nadie te percibe.
No existes,
estás sola.
Pero eres fuerte,
como cinco sentidos,
como cinco mentes.
Y oirás, y escucharás.
Y besarás y reirás.
Y acariciarás y tocarás.
Y verás, observarás,
olerás, apreciarás...
Y te invadirás de todo.
Como cinco sentidos.
Como cinco mentes.
domingo, 28 de julio de 2013
Rayo de luz.
Negro,
ahora todo es negro.
Oscuridad,
triste final.
¿Cómo alumbraré ahora,
si mi luz me abandona?
Sin linternas,
ni lámparas ni velas.
Sin calor,
ni vida ni amor.
Sólo negro,
oscuridad e infierno.
Una chispa,
que encienda la vida.
Sólo eso.
Recuerdo el sol,
la luz, el calor...
Iluminaban mi cara,
mi vida y mi cama.
Un fuego intenso,
apacible y salvaje.
Una hoguera inmensa,
ardiente y eterna.
O eso creía.
Pero se apagó,
a oscuras me dejó.
¿Y ahora?
Sólo una vacía habitación.
Oscura y siniestra.
Triste y muerta.
Sin brillo, ni calor.
Sin luces, ni color.
Negro,
ahora todo es negro.
¿Qué haremos?
Pregunté al infierno.
Pregunta a tu alma,
si todavía la conservas.
Grita al cielo,
no aquí abajo.
Vivir a oscuras,
con miedo.
Miedo a la luz,
a la oscuridad...
Miedo a vivir,
miedo a soñar.
Vuela,
más allá de esta triste habitación.
Descubre.
No sólo hay una luz.
Busca llamas,
busca en las miradas.
Busca chispas,
busca en las sonrisas.
Descubre.
No sólo hay una luz.
No todo es negro,
penetra un rayo de luz.
Armonioso y tibio.
Dulce y amigo.
Juega con él,
olvida el fuego.
El fuego quema,
un rayo de luz sólo alumbra.
Y así será.
Segura e iluminada,
con menos luz y calor.
Pero, con un rayo amigo
que me sirva de abrigo.
El fuego quema,
un rayo de luz sólo alumbra.
Y así será.
domingo, 7 de julio de 2013
Mis sombras.
La vida promete,
promete matarte.
La muerte acecha,
te vigila con cautela.
No huyas,
te sigue cual sombra.
Oscura, misteriosa, inevitable...
La muerte es tu sombra.
Inseparable, enemiga de la luz.
Así es ella.
Tu muerte, tu sombra.
Aunque te escondas,
aunque te mantengas a oscuras.
Tu sombra no desaparece,
sólo se oculta para no asustarte.
A veces prefieres ocultarla tú mismo,
en la oscuridad.
Esa oscuridad esperanzadora,
una segunda oportunidad.
Pero aún así tienes miedo,
sigue rozando tu cuerpo.
Esta sombra me recuerda al amor.
Al amor que me sigue.
Puedo ocultarlo, pero no sirve.
Te amo del mismo modo.
Te amo a oscuras,
te amo a la luz
Te amo ahora
y te amaría cuando mi sombra se me llevara.
Dos sombras me persiguen pues.
Tu amor y mi muerte.
Dos sombras invencibles,
dos sombras indivisibles.
Te amo.
Te amo como mi muerte me ama.
Para siempre,
pase lo que pase.
Y así esperaré tu regreso,
hasta que mis sombras decidan.
domingo, 26 de mayo de 2013
.
No eres más que un grano de arena en el inmenso desierto, sin embargo, todo lo que sucede a tu alrededor lo has causado tú. No es muy lógico, pero eso no importa.
Sientes que todo está vacío, que vives en un mundo ficticio y que hagas lo que hagas no irá mejor. Te sientes frustrado, no quieres vivir el momento ni saber del mañana. Ya no vives, ríes ni sueñas, solo dejas pasar el tiempo esperando una muerte, quizás no temprana, pero segura.
Nada tiene sentido, haces las cosas sin sentirlas, simplemente porque la sociedad opina que son buenas, pero no te hacen feliz. De hecho, nada te hace feliz. Caminas en un mar de lágrimas y buceas entre la fría tierra, no es muy lógico, pero, como ya dije, no importa.
Observas las almas de la gente y no consigues entenderlas, no entiendes ni siquiera la tuya, incluso dudas si estás cuerda.
No eres la misma persona, y lo sabes. Es como si de pronto tuvieras un nuevo cerebro que te hiciera diferente. Siempre lo fuiste, eso también lo sabes, pero ahora este nuevo cerebro te hace una persona triste sin ganas de vivir, sin metas ni ilusiones. No quieres vivir, pero no quieres morir. Solo deseas tener una sonrisa en la cara y un motivo, pero eso creo que es un reto que ahora no me puedo plantear.
Niña.
pues tus mares salados no harán que regrese.
Niña no sufras,
por muchas dagas que te claves no reaccionará.
Olvida tus sueños,
tu origen,
tu dulce infancia.
Nada tiene valor con la muerte,
esa muerte amarga.
Tu muerte es rutina,
te desangras cada día.
Tus fluidos salen de ti,
de tu alma.
Niña no pienses,
ya que eso no te devolverá la razón.
Aquella razón.
Esa que perdiste,
sí, por amor.
Duerme dulce niña,
agárrate a la vida,
y tus penas olvida.
No será fácil,
un latigazo te despertará.
Entonces volverás a la vida,
al llanto.
Y saldrás,
te sentirás insignificante,
y caerás en la enfermedad.
Niña, ahora eres pálida,
maquilla tus sentimientos.
Sal a la calle,
tus apariencias te engañarán.
Olvida, como si se tratara de tus sueños,
esos que tienes mientras agarras a la vida.
Son las doce, niñita.
Hasta mañana.
domingo, 28 de abril de 2013
Aroma de infancia.
Leña, el frío invierno de Teruel.
Rocío, las noches de navidad.
Lluvia, días tristes de película.
Desearía guardar cada uno con una etiqueta para recordarlos en el momento exacto.
Añoro muchos de esos días.
Ahora huele a paella, mi padre estará cocinando.
Pero no, realmente es un simple bar con el aroma de mi infancia.
Camino por la calle y los aspiro, evadiéndome del mundo y volviendo a mi niñez.
Qué dulce flashback
Sin embargo, no todos los aromas denotan dulces recuerdos.
Hay malos, pero no los capto porque siento repulsión hacia ellos.
En fin, andaré por las calles recordando mi infancia y empapándome de las vidas ajenas mientras muchos crean sus aromas de niñez.
Será un suave aroma, quizás fuerte.
Sea como sea, será aquello que eres.
Tú y tu vida, tu origen.
Quizás tu debilidad o tal vez tu fuerza.
Será aquello que amas,
o aquello que detestas.
Pero será tu aroma,
de tu infancia.
miércoles, 24 de abril de 2013
Sólo esperar.
Saber que no vive,
ver que no muere.
Lento se apaga,
no del todo.
Será o no será,
pero no es la cuestión.
Vivir sin piedad,
odiar sin respirar.
Ver que se consume,
que te consume.
Pasan milenios,
no cambiará.
Vida sin aire,
muerte sin tierra.
Ya se va,
poco falta.
Sólo aguarda,
aunque sufra.
Sólo aguanta,
aunque rabie.
Pasará, tal vez,
quizá no.
Saber que no vive,
ver que no muere.
Sucederá, paciencia.
Y entonces vivirá.
Sólo aguarda,
aunque sufra.
Sólo aguanta,
aunque rabie.
Abre los ojos,
desaparecerá.
Quedará la pesadilla,
un mal sueño.
Es pasado,
no futuro.
Decidirá tu vida,
el presente.
Sólo espera,
a que pase tu primavera.
Tan sólo sigue,
valdrá la pena.
lunes, 15 de abril de 2013
Tic-tac.
bajo el frío de la tierra.
Vistamos de negro,
mientras dure el invierno.
Rosas reprimidas,
cuervos fomentados.
Oscuridad durante el día,
silencio cada noche.
Nacer enterrado,
vivir tras una sábana.
Dormir aterrado,
morir por ganas.
Realidad egoísta,
mundo invisible.
Dulce pesadilla,
sueños imposibles.
Evadirse de todo,
no cumplir nada.
Tener deseos
y una lágrima desesperada.
Abriréis los ojos,
risas al viento.
Viviréis con gozo
tras un tiempo.
Cuestión de contar,
tic-tac y serás.
Sentar y esperar,
cuestión de esperanza.
Cuando seas todo acabará,
sólo oye el tic-tac.
Din don, está aquí
tu remedio al mal.
Regreso.
no busco, sólo encuentro.
Una mirada de pasión,
un beso a traición.
En la penumbra de la noche,
bajo la mirada de las estrellas.
Permanecer es un derroche,
pues no habrá más que ellas.
El silencio del tiempo,
el aroma del viento.
Al aire el corazón,
dejando que vuele.
Dulce tono de amor,
todo se reduce a un latido.
Es sentir un ardor
de fruto prohibido.
Démonos un sólo momento,
y con duro detenimiento
obedezcamos a la intuición,
si no regresó fue por temor.
Temor a la debilidad,
de un cálido susurro,
Ansias de libertad,
y un mar de orgullo.
Desearía de un soplo hallarte,
pero cuando la Luna desaparece
y brilla el fuego en el aire,
mi melancolía se desvanece.
No es falta de amor,
no es pecado, ni terror.
Es desespero sin perdón,
unido a falta de valor.
Indecisión.
Esa presión e inseguridad.
Como que tiran de ti,
una cuerda en cada brazo
y estirar hasta decidir.
Es no saber que hacer,
no querer caer.
Pero tendrá que pasar.
¿Qué lado será mejor?
¿Amargura rutinaria con un toque de amor
o sonrisas diarias con gran ilusión?
Es indecisión, simpatía por ambos lados,
pero al fín y al cabo sólo puede haber un vencedor.
¿Y, mientras? Reflexionar como un filósofo.
Planteando pros y contras,
preguntas sin respuesta
y toda una serie de enigmas.
domingo, 7 de abril de 2013
Oculto.
Como el reflejo sobre un charco,
un misterio nocturno
oculto entre las aguas.
Como un secreto bajo pena,
ansiado por ser escuchado,
pero a menudo en vano.
Es desear ante la incapacidad,
querer y no querer,
gritar en el silencio.
Cruel impotencia,
odioso deseo,
murmullo de pensamientos.
Desapareced, nada más,
sed guardados bajo llave
y más tarde deshaceos de ella.
No hay intención de saber,
sólo de olvidar,
por tanto no pensar jamás.
domingo, 17 de marzo de 2013
Buen viaje.
— Buenas tardes.
— Sólo venía a despedirme.
— ¿Despedirte?
—Sí, me voy a ir...
— ¿Dónde?
— Lejos.
— ¿Cómo de lejos?
— No lo sé.
— No exactamente.
— Vaya. ¿Dónde te gustaría ir?
— Quiero marcharme allá donde no exista la crítica, el sufrimiento, la conciencia. A un lugar lejos de la razón, la obligación y el temor. Donde puedas ser feliz, vivir como desees. Y, por supuesto, con quien desees.
— Parece un lugar agradable.
— ¿Y cuándo dices que querrías irte?
— Ya mismo, si fuera posible. Pero aún no sé donde hallar ese lugar de paz interior, exterior al pesimismo de la sociedad y excluido de la dureza de las especies.
— Entiendo.
— ¿En serio? ¿Entiendes?
— Sí.
— Vaya, creí que estaba loco, ¡qué alivio!
— No estás loco, realmente no hay nadie que esté cuerdo.
— Podría ser, es un pensamiento bastante maduro.
— Quizás, o tal vez sea que mi falta de cordura me hace verlo así.
— No lo sé. Bueno, buen amigo será mejor que inicie ya mi viaje.
— Pero no sabes adónde ir. ¿Qué piensas hacer?
— Tienes razón, estoy loco, vaya.
— Conforme me has descrito el lugar al que te gustaría viajar...
— Viajar no, perdona que te interrumpa, vivir. Quiero vivir allí y no volver a pisar estas tierras.
— Mmm, entiendo. ¿Sabes qué?
— Dime.
— Yo conozco un lugar así.
— ¿De verdad?
— Sí, igual al lugar que has descrito.
— Llévame, por favor.
— ¿Estás seguro?
— Sí, lo estoy del todo.
— Va a ser un viaje muy corto, pero duro. ¿Realmente estás dispuesto a correr el riesgo?
— Así es.
— Está bien. Cierra los ojos.
— Vale. ¿Muy fuerte?
— Todo lo que puedas.
— ¿Y ya está?
— No, aguanta la respiración y deja la mente en blanco.
— ¿Cuánto tiempo?
— Eso depende de ti. Cuando creas que eres feliz para.
— Está bien, gracias viejo amigo.
— No me des las gracias, no las merezco.
—Bueno, voy a iniciar mi viaje. Hasta pronto, fue un placer conocerte.
— Igualmente. Antes me gustaría decirte que fuiste un buen amigo y yo, en cambio, no hice nada para evitar tu desgracia.
— No importa, lo superaré, o eso creo. De todos modos no te preocupes.
— Eso espero, me siento culpable.
— Ya te he dicho que no pasa nada.
— Vale, bien, ahora serás feliz, lejos del mundo cruel en el que vivimos.
— Sí, así es. Bueno sin más, me marcho. Odio las despedidas.
— Está bien, buen viaje.
— .
domingo, 24 de febrero de 2013
Mi gran amor
Desde que nací él fue mi amor, mi todo.
Me enseñó a comprender el mundo, a investigar más allá de lo establecido, a amar aceptando todos los defectos y virtudes. Me educó en la mayoría de todo lo que hoy sé.
Me creó dudas y certezas, me demostró que no es necesario permanecer presente para amar a alguien y que a pesar de todos los errores cometidos siempre podría tener su alma a mi disposición. Sería capaz de entregar hasta la última gota de su sangre por mi honor y mi vida y, aunque no siempre se lo muestre, realmente sería capaz de hacer lo mismo por él.
Es la persona que ha marcado mi vida. Es y ha sido mi primer amor, mi gran amor. Un amor que jamás me ha fallado. Un amor real, verdadero e inconmensurable.
Este amor es mi padre, la razón de mi existencia.
miércoles, 20 de febrero de 2013
Ni un recuerdo más.
Es un fuerte ardor en el pecho,
un vacío en todo el cuerpo,
una debilidad que me inspira.
Es sentir que no sientes,
que amas sin amar,
que quieres sin querer.
Debilidad de corazón,
espíritu de mente,
olvido de razón.
Nada más si vive.
Cuando el corazón llora,
el alma escribe.
Nada más si olvida.
Mientras tú le añoras,
nadie mira.
Tal vez tuvieron razón,
tal vez sí fui yo,
pero, tal vez no.
¿Remordimientos del pasado?
Pura estupidez.
Sin embargo a tú lado...
Borremos los recuerdos,
olvidemos viejos tiempos,
no habrá más.
Quizás desee añorar,
mas no lo haré
aunque me deba torturar.
Sentiremos desangrarnos,
caer a tierra y agonizar,
mas ni un recuerdo más.
Quizás deseemos rendirnos,
volver al pasado,
mas ni un recuerdo más.
Sigamos el sendero,
a pesar de cojear,
a pesar de sollozar.
Sigamos el camino,
pero siempre de pie,
sin arrastrarnos por él.
Todo irá bien,
o todo irá mal.
Mas ni un recuerdo más.
lunes, 4 de febrero de 2013
Apariencia.
Parece perfecto,
una vida de ensueño,
deseada por cualquiera.
hay una lágrima escondida,
un sentimiento negro,
un frío recuerdo.
son gotas de rabia,
lluvia de dolor,
rocío de impotencia.
un sentimiento indescriptible,
un dolor invisible,
una duda eterna.
el mundo se hunde sin parar,
y vosotros en lugar de mirar lo bueno
no dejáis de criticar.