sábado, 27 de diciembre de 2014
Cariño
Con tu odiosa mirada de cañón, con la que me bombardeas como a un enemigo.
Con tu muro de espalda, con el que te cubres, con el que intentas detener mis llamadas.
Y con todo eso aún te cuestionas qué sucede, todavía no sabes qué hiciste.
Dime, cariño, ¿qué se siente al saber que aquello a lo que amas se ha ido?
¿Qué te parece si te digo que es más duro tu amor que el olvido?
¿Crees que es agradable vivir amando y odiando a un miserable?
¿Acaso no sabes que es mejor no amar que amar sin razones?
Cariño, tu amor se fue. Y si vuelve quizás no vuelva.
Y tú vivirás en la duda, escondido tras la puerta.
miércoles, 3 de diciembre de 2014
Crudeza.
sin querer saber la verdad...
o la cabeza agachada y los pies en la tierra,
en la cruda realidad.
¿Soñar? ¿Vivir?
¿Dormir? ¿Morir?
Vivir soñando,
morir durmiendo.
Eso haría feliz.
Eso y sonreír.
Optimismo / Pesimismo
Vida / Muerte
Sueño / Realidad
Todo unido,
todo extremo.
Y al final hay cosas buenas y malas,
vivimos y morimos,
soñamos y algunos sueños se cumplen (o no).
Y no queda nada después de esta vida,
y todo se acaba cuando tú te vas.
miércoles, 26 de noviembre de 2014
Cuerpo y mente.
La vida vuelve a ser lo mismo.
Mi cuerpo y mi mente me odian.
Se han unido para matarme.
No soy dueña de mis actos.
No controlo mis pensamientos.
Aniquilaría a mis rivales,
pero acabaría conmigo misma.
Me entregaría a los malos vicios,
desvaneciéndome poco a poco.
Pero no soy capaz,
aún me importo algo.
Bebería sin parar,
hasta quedarme inconsciente.
Pero no soy una alcohólica,
soy una bohemia.
Parecería una drogadicta
infectada de veneno.
Pero el drogarse es un acto de rebeldía contra el propio cuerpo.
No quiero rebelarme contra él,
solo que me entienda.
Aunque le grito,
no me escucha.
Aunque lo maltratara,
no mejoraría su actitud.
La mente lo tiene engatusado,
y esta no me quiere obedecer.
Son cómplices de mi desfallecimiento,
de mi subida y mi caída,
de mi estado,
de mi día a día,
Mi cuerpo y mi mente me odian,
y eso me tiene aterrada.
No poder salir de mí
ni poder permanecer siendo yo.
Resulta tétrico convivir así.
Mi cuerpo y mi mente me odian.
Se han unido para matarme.
Y yo no puedo luchar por mi vida contra mi vida.
Mi querido Libro.
que me hablará de amor.
Siempre quise uno.
Por ello leí mucho.
Libros sin parar
y en gran variedad.
Algunos eran pésimos,
otros aparentemente buenos,
los demás no decían nada.
Había libros con atractivas portadas,
también con feas o raras,
pero por prejuicios los cerraba.
Unos atraían más,
otros menos;
pero ninguno tenía valor.
Pasaba el tiempo,
todos eran mediocres.
Pospuse mi proceso.
Me inicié en la lectura,
pero ahora en la absurda.
Me dejaba llevar; irracional.
Quería olvidar todo lo aprendido,
dejar de pensar por fin,
y ahora leer sin sentido.
En tal caos releí libros,
abrí los que permanecían cerrados,
arranqué y quemé páginas.
Entre hogueras, papeleras y trozos de papel;
entre desorden físico y mental;
entre agotamiento y locura.
Arañé portadas con las uñas,
mordí hojas con mis dientes,
aplasté todo lo inservible.
Estuve a punto de terminar,
rociándolo todo con gasolina,
sin leer ya más.
Entonces apareció mi Libro.
Uno que un día soportó mis prejuicios,
que no quise abrir.
Y, desde luego,
él no había querido ser leído por mí.
Resurgió en el tiempo y espacio correctos.
A mitad de mi desastre,
en medio de una biblioteca deshecha,
casi en ruinas por mi búsqueda.
El Libro perfecto que nunca acabaré.
Del que jamás me desharé
del que no me cansaré.
Y leeré página a página,
hasta que mi cuerpo no pueda más,
hasta que la vejez impida.
Será el Libro de mi vida.
Es el Libro de mi vida,
inmortal y perfecto.
Una historia que jamás morirá,
ni con su destrucción.
Porque los libros cuentan.
Vivos o muertos la historia es historia;
y la nuestra, querido Libro,
aún está por contar.
domingo, 2 de noviembre de 2014
Frío, silencio
De vez en cuando ladra un perro a lo lejos.
Se oye el silencio.
Cuántas personas estarán ahora en sus casas.
Huele a frío, a nostalgia.
Y todo esto lo cubrimos con una manta.
Se oye el silencio y tomamos café.
Callados y vendados de arriba a abajo.
En el sofá que no dice nada.
En el sofá que si hablara contaría mil cosas.
Nos delataría, pero no puede.
Y seguimos en silencio.
Miramos la taza, pensamos.
Qué frío hace fuera.
La gente seguirá en casa por meses.
El perro ya no ladra más.
Hace frío y nos sentimos nostálgicos.
Así sin motivo.
Nos gusta la vida,
nuestra preciosa vida.
Amamos dormir y volver a despertar,
mirando un día nuevo en los ojos del otro.
Huele frío, a nostalgia.
Y realmente no estás aquí.
Es solo el recuerdo de tenerte
en el sofá ya mencionado con un té o un café.
El abrazarnos sin decir nada,
saboreando juntos este ambiente melancólico y frío.
Se oye el silencio.
Huele a frío y a nostalgia.
No estás aquí.
Pero no importa.
Hoy no debemos vernos,
saborearé yo este instante por ti.
Cuando la vida
Cuando la vida se convierte en un constante: quiero reír, y debemos mantenernos serios.
Cuando la vida se convierte en un constante: quiero salir, y andamos encerrados entre papeles.
Cuando la vida se convierte en un constante: quiero viajar, y no tenemos dinero.
Cuando la vida se convierte en un constante: ¿qué sentido tiene esta vida?
Entonces todo se ve aún más negro y la vida se convierte en un constante miedo a vivir y morir.
Cuando la vida se convierte en un constante: miedo a vivir y morir, creemos que no queda nada.
Pero ahí es cuando la vida puede convertirse en un constante recuerdo de aquellos momentos felices que tuvimos, y ahí es cuando podemos crear otros pequeños recuerdos poco a poco.
Cuando la vida se convierte en un constante: recuerdo y un optimismo por cumplir minúsculos deseos, somos más felices.
Cuando la vida se convierte en una constante: felicidad, olvidamos lo negativo, nos sentimos llenos.
Cuando la vida se convierte en una constante: plenitud, nos va mejor.
Y cuando la vida se convierte en una constante: mejora, la vida deja de ser una constante.
lunes, 6 de octubre de 2014
Infierno.
Vivirías en un lugar ardiente y oscuro.
Pecarías y me tentarías a seguir tu ejemplo.
Caería en tu trampa, seguro.
Aún es más apetecible pecar por ti, contigo.
Me condenarías y me arrastrarías hacia tu ardiente terreno.
Y sabría que no hay salvación, o sí.
Y moriría a tu lado, y resucitaría en un suspiro, un beso o un orgasmo.
Y aunque resucitara y tuviera la oportunidad de rehacer mi vida de otro modo, volvería a pecar al instante.
Y pecaría durante un siglo si pudiese.
Cada hora, minuto y segundo en un continuo pecado que nunca acaba.
Amando lo que ambos sabemos y riendo de los pobres infelices que prefieren rendir culto a un ser que quizá no salve a nadie.
Viviremos esta vida como infieles y la siguiente, si es que hay otra.
Y aquellos infelices no vivirán ésta y quizás no tengan otra.
Y eso nos convierte en condenados satisfechos prisioneros del amor, pero sólo del nuestro.
Y te amaré y me amarás hasta que el fuego se apague y aún más allá.
Y viviremos así eternamente o hasta que esta vida arrase con nuestros cuerpos y quizá con nuestras almas.
Tú y yo en este infierno, ahora y siempre.
Hasta el final.
lunes, 22 de septiembre de 2014
Cielo efímero y eterno.
para tenerte un minuto.
Dame un segundo,
para amarte un siglo.
Piérdeme, búscame y encuéntrame.
Ódiame, enamórame y ámame,
Dame lo que te da la vida,
lo que te da vida.
Dame lo que no tuviste,
lo que tienes.
Colisionemos frontalmente,
accidentados, enamorados.
Viajemos sin salir,
más allá de este techo.
Más lejos que aquel tejado,
sobre las estrellas.
Paseando entre algodones,
entre suaves capas de amor.
Creando nuestro propio rocío,
dejándolo allí impregnado.
Creando vida y muerte,
amor y dolor.
Lanzando rayos y truenos,
paseando a media voz.
Dejando a la noche seguir oscura,
sin una luz en el cielo.
No nos hace falta ahora.
Sólo dos cuerpos.
Dos cuerpos viajeros,
dos cuerpos idos y permanentes.
Y todo sin salir de esta cueva,
sin levantarse siquiera.
Viajar a otro mundo,
vivir allí por un instante.
Pero tú y yo aquí.
Aquí y allí.
Tú y yo,
efímera y eternamente.
Una y otra vez
y a cada instante.
Rozando y amando,
acabando y empezando.
Así tú y yo aquí
y en nuestro universo paralelo.
viernes, 1 de agosto de 2014
NADA
se ha quedado el ruido.
El mundo es sólo sonido.
Las gentes odian la NADA.
Todo está abarrotado,
ridículamente sobrecargado.
Detestan el silencio.
No lo entienden,
no lo conocen.
O sí,
y aún no lo saben.
Se ama en silencio,
al margen de la vida.
Se odia en calma,
sin que nadie te oiga.
Se duerme a oscuras,
en la noche,
en la NADA.
Se hace el amor acompañado,
entre suspiros,
sin decir NADA.
La felicidad es eso,
NADA.
Y ellos no lo entienden.
Y es por eso que,
quizás sean infelices.
Por eso.
Y es por eso que,
quizás yo te ame.
En la NADA.
Cuando callas,
cuando no actúas.
NADA.
Ahí te amo yo,
cuando no hay nada.
En tu estado puro.
Las letras son inciertas,
a veces,
pero no en la NADA.
Tu palabra no es tuya,
quizás sí,
o sólo puro artificio.
Es indigna de ti,
a veces,
otras un exceso.
Mas en la NADA...
Ahí eres tú.
NADA, carne.
Y así te amo yo.
Cuando callas,
cuando eres tú.
Cuando no eres NADA
y a la vez eres todo.
Eres tú, amor.
Eres todo y NADA.
Libre de ti,
de la vida.
Pero esclavo del silencio,
de mi silencio,
de nosotros.
sábado, 28 de junio de 2014
Puede.
No te quise nada.
Quizás un poco,
o mas bien no.
Teníamos "algo".
Poca cosa,
o tal vez todo.
Era algo vacío.
Sin sentido,
o puede que sí.
Y cambió.
Marchamos ambos,
cada uno, dos.
No te quise mucho.
Quizás algo,
o mas bien sí.
Teníamos "todo".
Mucha cosa,
o tal vez nada.
Era algo lleno.
Con sentido,
o puede que no.
No nos quisimos.
Nos quisimos.
Nada, mucho y poco.
Te extrañé,fue cierto.
Tú a mí sobre todo,
tal vez sí o además no.
Volveremos, será real.
¿Te querré? Ni si ni no.
Imposible de plantear.
El tiempo hablará,
le mandaremos callar.
Será un sí o sí.
Y surgirá una nueva vida.
Probablemente, o no.
Dudosamente, o seguro.
Nada confirmado,
todo variable,
excepto un hecho.
El tiempo hablará,
le mandaremos callar.
Será un sí o sí.
lunes, 26 de mayo de 2014
Mendigo.
Fui como ese pobre al que le dan de comer un buen plato por primera vez.
Engullí todo lo que tenía delante, sin pensar, sin parar ni un segundo, sin darme cuenta de que después de ese plato no habría ninguno más. No guardé ni una miga de pan. Acabé con todo lo que había y con tal rapidez que casi me atraganto.
Pasaron días, semanas y meses y jamás volví a probar un bocado como aquel. Me tuve que conformar con lo poco que me iban dando los desconocidos por la calle. Me llegaba para vivir, pero pasaba hambre, mucha hambre. Me mantuve firme con el estómago hambriento, recordando aquel plato que devoré sin dejar nada. Arrepintiéndome de haberlo devorado ferozmente sin haber guardado nada para otro día.
Ojalá pudiera volver a probar un bocado como aquel, sin duda haría lo posible por que permaneciera más tiempo conmigo.
jueves, 15 de mayo de 2014
El Mar.
¡Oh, el Mar!
Rey de la Tierra,
príncipe de las aguas.
¡Oh, el Mar!
El reflejo de la luz,
sobre tu claro azul.
Tus olas, tu cielo.
¡Oh, el Mar!
Bella extensión,
humilde hermosura,
mirada transparente.
¡Oh, el Mar!
Eres agua, necesidad.
Al mismo tiempo ahogas.
¡Cruel bebida asesina!
Así eres tú,
como el Mar.
¡Oh, el Mar...!
domingo, 30 de marzo de 2014
Día de lluvia.
Silencio.
Silencio.
Pájaros cantando.
Silencio.
Pasa un tren.
Silencio.
Pájaros cantando.
Chispea.
Empieza a llover.
Sentados en el sofá.
Silencio.
En la calle lluvia.
En el salón besos.
En la cama estudiantes leyendo.
En el suelo niños jugando.
En el campo estufas de leña.
En la ciudad cuatro radiadores.
Llueve.
Y sigue lloviendo.
Los pájaros siguen cantando.
La casa a oscuras.
El cielo gris.
Silencio.
Silencio.
Ahora a dormir.
domingo, 9 de marzo de 2014
El cercle impossible.
tot és somni i roselles.
Quan les donzelles dormen,
es queden a soles.
L'amant fuig.
Sempre fuig.
Si no fugira,
no seria amant.
Desapareix entre estrelles,
a la nit de les penes.
Desapareix sense ser vist,
quan a casa no es troba el marit.
La donzella es desperta.
Troba a faltar a l'amant.
Però res no pot fer,
el marit lligada la té.
Si el deixara...
Si fugira...
Què ocorreria?
La buscarien?
Tal vegada no.
O potser que sí.
Però mai fugiria amb l'amant.
No l'estima.
No més vol una nit,
no tot un dia.
Amb l'amant no fugiria.
Doncs, què hi faria?
I si fugira a soles?
A soles la trobarien.
A soles no potser.
A soles trobaria a faltar l'amant.
I si...?
Bé, no més queda una opció.
Quedar-se'n amb la bèstia de dia,
amar en secret a la nit.
La bèstia que l'estima.
La bèstia que no vol.
El secret que ama.
El secret efímer.
El secret que no sent,
que no vol amor.
Aquest secret no en té dona,
fa mesos que va morir.
La recorda de dia,
l'evoca a la nit.
Pobre amant,
pobra donzella,
pobre marit.
És el cercle impossible
del dia a la nit.
viernes, 7 de febrero de 2014
Letras.
Imaginación, frase, oído.
Nos abrazamos con fuerza.
Como hermanos, como novios, como amigos.
Nos amamos.
Simplemente nos amamos.
Nos dominamos.
Éramos dioses.
Yo tu diosa y tú el mío.
Me controlabas, te controlaba.
Como el Estado controla al ignorante.
Íbamos a ciegas.
Nos guiaban las palabras, las promesas.
Entonces hicimos el amor,
durante días, durante horas.
Sin dejar ni una sola letra por recorrer.
Las palabras perdieron sentido,
las promesas murieron y curé mi ceguera.
Fuiste un falso ciego,
un traidor.
Te fuiste,
pero siempre quedarán aquellas palabras que decían:
Entonces hicimos el amor,
durante días, durante horas.
Sin dejar ni una sola letra por recorrer.